REESTRUCTURACIÓN
PRODUCTIVA Y DESARROLLO TERRITORIAL: PROPUESTA PARA COLOMBIA
Foto: Gabriele Siegrist |
Este artículo también está publicado en www.razonpublica.com y hace parte de la alianza con Fescol www.fescol.org.co
El
desarrollo productivo y de la ciencia, la tecnología y la innovación (CTI) debe
darse en dos macro ámbitos espaciales interconectados: el campo y las ciudades.
El núcleo serán las mipymes, grandes empresas y nuevos emprendimientos, centros
de investigación, educación y un sistema de movilidad moderno y
sostenible.
1. Las empresas del campo y de las ciudades
El mundo del campo
Un nuevo rumbo para
la economía incluye la reestructuración de la actividad campesina, a través de mipymes
primarias o agroindustriales, y su articulación con las mipymes de los centros
urbanos en cuanto a integraciones industriales y de servicios, conectados con
núcleos de investigación de una economía rural del conocimiento, donde los productores sean actores activos
del cambio tecnológico, del mejoramiento continuo, de la innovación abierta y de
la calidad en la formación.
Las mipymes
rurales deben ser el motor de la producción primaria y de agroindustrias de
cierta complejidad que puedan formar pequeñas cadenas de producción a veces vinculadas
a cadenas de las grandes empresas. También abrir nichos de especialización para
fabricar insumos y tecnología de producción integradas a empresas innovadoras
de las ciudades, y de esa manera conformar
sistemas territoriales de industrias y
negocios de la agricultura, la energía y la bioeconomía rural.
Las poblaciones con
mayores rezagos deben acceder a programas especiales de asistencia tecnológica
y de educación para subir el nivel de aprendizaje, su productividad y calidad
de vida.
Las grandes
empresas asociadas a grandes cultivos deben tener una agenda de desarrollo
científico y tecnológico sostenible, y de diversificación de las respectivas
cadenas: tendrán incentivos por productividad, innovación, empleo,
exportaciones, diversificación, desarrollo sostenible, y apoyo a la inversión
social en el territorio. La financiación: un peso del estado un peso de los
empresarios, pero primero el peso de los empresarios.
El Sistema Nacional de Innovación
Agropecuaria (SNIA) y los Sistemas Territoriales de Innovación (STI) que se deben
crear, se integrarán a
redes nacionales e internacionales de investigación e innovación.
El
mundo de las ciudades
Las políticas de
restructuración productiva (PRP) y de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI)
deben responder a necesidades y posibilidades de las MIPYMES para una triple
función: creación de cadenas de pymes como eslabones estratégicos de grandes
empresas y para impulsar emprendimientos de nueva generación (start ups).
Los apoyos deben ser de dos tipos: para empresas especializadas en sectores maduros y menor productividad que generan empleo, exportaciones y pagan impuestos; y para empresas de sectores de alta tecnología y elevada productividad como consecuencia de la política de reestructuración productiva.
Las grandes
empresas deben ser el motor de la diversificación y de nuevas
exportaciones. Con la apertura de la economía, ellas fueron las que decidieron
a dónde querían ir, ahora deben ir a donde el país necesita que vayan. En este
contexto, fortalecer las multilatinas colombianas es una prioridad
estratégica, así como atraer empresas de otros países para producir y hacer
investigación y desarrollo: el país les entrega el mercado, ellas le entregan
conocimiento, un principio de reciprocidad.
Para fortalecer los sectores más innovadores y sus empresas, se necesita crear el Sistema de Industrias y Servicios Avanzados (SISA) para potencializar el aprendizaje, el cambio tecnológico y las complementariedades. El sistema incluye formar la RED de Centros y grupos de investigación de sectores avanzados, nacionales y extranjeros aliados con instituciones nacionales.
La
Agencia Colombiana de Industrias de
la Innovación (ACIIN). Esta será una agencia especializada en apoyar
investigación aplicada de alta complejidad sobre todo en sectores promisorios de
tecnologías disruptivas. La agencia gestionará y articulará acciones entre
centros y grupos de investigación con las empresas, y cofinanciará los
proyectos elegidos mediante convocatorias públicas.
La ACIIN trabajará con grandes empresas, multilatinas y medianas empresas. Eventualmente puede haber proyectos conformados por conjuntos de pymes de los sectores innovadores asociados en un proyecto de investigación. La ACINN debe estar ubicada en Bogotá o en el arco industrial de la Sabana de Bogotá.
2. Estrategia
de Desarrollo Territorial para la integración, la productividad y la innovación
El centralismo estableció puentes de conversación entre cada territorio y la nación, pero no entre territorios. Asimismo, fracturó las posibilidades de las integraciones regionales. Cada Departamento conversa con la nación, pero no con los vecinos. Las RAPE (región administrativa de planificación económica) tienen poco músculo, aunque se pueden fortalecer, dándole alguna capacidad de ejecución focalizada y como instancia de participación de ciertas decisiones estratégicas, en temas como: medio ambiente, infraestructura, integración productiva y en innovación en especializaciones que se extienden a dos o más departamentos. Deben convertirse en una instancia de transición a la autonomía de las regiones.
Las
mega regiones y los corredores regionales de desarrollo productivo e innovación son viables si existe una relación
entre autopistas, vías secundarias y terciarias, redes digitales, desarrollo
productivo, educación y CTI. Sin infraestructura es imposible impulsar procesos
de desarrollo endógeno.
· Mega regiones y La Guajira: Pacífico, Amazonia, Llanos Orientales y
la Guajira: énfasis en Bioceconomía, las nuevas energías, y en industrias
culturales, sobre todo en el Pacífico. Para ello fortalecer la educación y
crear núcleos de investigación articulados con universidades de mayores
capacidades de la misma región: p.e. En Tumaco hay sedes de la UNAL y de la
UDENAR. Así se pueden conectar capacidades de las zonas continentales con más
capacidades y las periferias.
Para los territorios menos
desarrollados, se debe impulsar los Centros Regionales de Investigación, Innovación
y Emprendimiento (CRIIE) en municipios principales de determinadas subregiones
de cada gran región. Por ejemplo, Tumaco, Bahía Solano, Quibdó, Buenaventura,
Mocoa, Yopal, Arauca, Riohacha, Florencia, entre otros.
Los CRIIE serían complementarios a los
centros de educación, cultura y salud, de esa manera conformar unos
minidistritos de la innovación que sean hitos de superación y esperanza. Del
atraso no se sale con asistencialismo, se sale con iniciativas que muestren
sendas de cambio y de nuevas oportunidades.
Los CRIIE deben ser un programa estratégico del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación articulado con la PRP. Tendrán apoyo de las universidades de alta calidad más cercanas o especializadas en las vocaciones promisorias de estos territorios.
· Corredores de desarrollo productivo e innovación para el cambio estructural: la reestructuración productiva requiere de autopistas o de buenas vías construidas y otras con estudios avanzados ya aprobados por el Estado. Lo importante es establecer de qué tipo son las vías principales de cada corredor: dos, tres o cuatro carriles, 4G, cuales proyectadas a 5G y 6G. Veamos algunos corredores posibles, a manera de ilustración antes que una caracterización o propuesta de ordenamiento territorial.
Putumayo, Huila, Tolima, Cundinamarca; Cundinamarca,
Bogotá y Boyacá; Cartagena, Barranquilla, Santa Marta (este corredor aún no
logra estructurarse como un potente proyecto de desarrollo regional, a pesar de
todos los estudios, discursos, intentos políticos por construir una integración
regional); Antioquia, Córdoba, Sucre; Tolima – Eje Cafetero - Chocó, que de
paso se integraría con el corredor que viene del Putumayo hacia Cundinamarca y el
que va de Bogotá – Ibagué – Valle del Cauca. Entonces se formaría un sistema de
movilidad del centro con el sur.
La paz de Colombia pasa por la
integración y el desarrollo de la Región del Pacífico: Chocó, Valle, Cauca y
Nariño, que puede convertirse en un gran proyecto de integración con Ecuador
tanto en la parte andina, amazónica y marítima. ser un corredor binacional marítimo
con Ecuador. Esto haría necesario construir la doble calzada Piendamó - Pasto
para superar el cuello de botella en el desarrollo del sur occidente de
Colombia. Si se construye esta doble calzada, habría una conectividad muy
desarrollada desde Boyacá hasta la frontera con Ecuador.
En los corredores debe haber
universidades de calidad que sean fuertes en investigación con núcleos
consolidados en actividades productivas estratégicas de la especialización,
tanto en sectores maduros como en nuevos en el marco de las PRP y de CTI.
· Distritos de la innovación y/o de la cultura. Se deben crear en ciudades de mediano y mayor desarrollo, y sería necesario evaluar a fondo el caso de Medellín, en torno a Ruta N y el proyecto del distrito de la innovación.
Grandes hábitats de innovación no se han podido desarrollar en Colombia, más allá de los estudios preliminares: Ciudad Salud Región, Innobo dentro de la Operación Estratégica del Anillo de la Innovación en Bogotá, el Parque de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional, la Región de Innovación (RINN) en la Sabana de Bogotá, la Tecnópolis del área metropolitana de Bucaramanga, y otras iniciativas más. Incluso, el distrito de la innovación de Medellín y en Bogotá el de Ciencia, Tecnología e Innovación, son proyectos aún incipientes, sobre todo el segundo pues viene de la saga del Anillo de la Innovación, gestado en el Plan de Ordenamiento Territorial de hace veinte años.
Ciudades pequeñas como Pasto, tienen las condiciones, espacio y actores, para crear un distrito de industrias culturales y de innovación puesto que sus carnavales son patrimonio inmaterial de la humanidad.
Sin embargo, Colombia ha sufrido una especie de castración que le ha impedido desarrollar capacidades para crear hábitats de innovación como consecuencia de la debilidad de las políticas de desarrollo productivo, de ciencia y tecnología, y educación. Si estás no impulsan el cambio estructural los hábitats producto de ese cambio, no sucederán.
Así las cosas, se deben impulsar múltiples distritos clasificados en tres categorías, según tamaño, especialización y nivel de desarrollo del territorio, según las PRP y de CIT generen las condiciones:
a) Barranquilla, Bogotá Región, Cali y Medellín.
b) Bucaramanga, Cartagena, Pereira, Manizales.
c) Cúcuta, Ibagué, Popayán, Pasto, Santa Marta, Villavicencio.
Los distritos deben tener recursos del gobierno nacional, incluyendo regalías y contrapartidas locales. En conclusión, Colombia necesita de una política de estado para reestructurar la economía y de una política de desarrollo regional que libere las capacidades regionales para autodeterminar su desarrollo endógeno, aliado con el nivel central del Estado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario